Caminos opuestos

Apenas te vi y en mi ardió Las brasas que en las cenizas estaban guardadas Las llamas de un querer que dormido estaba

Aunque nuestros caminos se bifurquen Culpables no somos del destino Tan solo alcanzamos lo que en el horizonte comprendemos.

Cuando mi recuerdo te acompañe De mi querer no olvides nunca Que mis brazos al final del camino te esperan.